martes, 20 de septiembre de 2011

Oscuros. El poder de las sombras

Hace unos meses leí Oscuros de Lauren Kate y acabo de leer su segunda parte que, en español, tiene el horrible título de El poder de las sombras. De esta saga no tenía pensado seguir reseñando pues, aunque es entretenida y se deja leer muy bien, tampoco es una de esas que te obsesionan o te encandilan como otras. Sin embargo, tras haber acabado esta segunda parte, he decidido reseñarla porque me ha sorprendido muy gratamente.

El poder de las sombras arranca, de nuevo, con el punto de vista de Daniel, en el que conocemos que ángeles y demonios han pactado una tregua que durará dieciocho días. En ese tiempo, Daniel y Cam se aliarán para destruir a todo aquel que va tras Luce, que está en peligro. Después, volvemos al punto de vista de Luce, que, tras huir de Espada & Cruz acaba en California donde Daniel le informa que, por su seguridad, debe permanecer un tiempo en una escuela nueva.

Por eso, dejamos atrás el halo deprimente de Oscuros para sumergirnos en uno más alegre y cálido, precisamente como es la Escuela de la Costa: un lugar cálido, alegre, moderno, equipado como un hotel... Donde estudian, encubiertos claro, los nefilim que son mellizos, hijos de ángeles y humanos.

Se agradece (y mucho) la nueva ambientación. Lauren Kate es una gran narradora, sabe expresar muy bien cómo son los lugares donde se desarrolla la acción, los sentimientos que provocan, además de los que tiene su protagonista.

De hecho, en esta segunda parte comenzamos a conocer más a Luce. Más allá de la depresión que arrastraba en Oscuros y de la obsesión por sus sentimientos hacia Daniel, Luce tiene más veres. En la Escuela de la Costa se relaciona con nuevos personajes, su situación es distinta y, por eso, la conocemos más. En mi caso, para mal. He confirmado que, además de sosa a más no poder, Luce es pava y un poco bastante idiota. Está tan sumamente centrada en sí misma que apenas usa la cabeza y, por lo menos a mí, eso me desespera un montón.

Me explico. Daniel apenas le cuenta nada (se supone que tanto él como los demás personajes deben cuidar sus palabras con ella, no vaya a ser que arda como hacía hasta ahora) y entiendo que eso la cabree. Comprendo que se sienta frustrada porque nadie le cuente nada, pero también es cierto que le dicen claramente que debe descubrir cosas por sí misma. Por otro lado, se pasan toda la puñetera novela diciéndole que está en peligro y que por eso no puede abandonar la escuela, ¿y qué hace Luce? Salir siempre que puede, exactamente.

Claro, luego la atacan a ella o a Dawn (una compañera que es muy parecida a ella) y se sorprende. Así que, claro, yo me quedo en plan: eh... si te han dicho que hay un escudo protector en la escuela y que debes permanecer dentro de él para que no te hagan daño, por algo será, ¿no?

Sin embargo, a pesar de las ganas de asesinarla por pava que sentía, el que Luce sea tan idiota y no haga caso a las advertencias, ni se dé cuenta de que los profesores de la escuela están ayudando a formarla, tiene sus cosas buenas: acción. Porque, claro, cada vez que Luce se larga de la escuela, le atacan. Eso supone encontrarte con algún viejo conocido que en esta segunda parte apenas salen. Por ejemplo, la primera vez que Luce se larga (y hace alarde de su gran inteligencia), es porque encuentra una nota de Daniel pidiéndole que abandone la escuela para encontrarse con él y, claro, es una trampa y Cam debe salvarla.

Por cierto, comentar lo sumamente estúpido que resulta creer que Daniel, que te ha insistido por activa y por pasiva que debes permanecer en la escuela y que puede ir a verte en cualquier momento, te manda una nota para que salvar de la escuela.

Y si Luce es desesperante por pava, Daniel lo es por soso. El problema con Daniel es que apenas aparece y, cuando lo hace, es para tener bronca con Luce porque ella no le hace caso. Entonces, claro, tampoco es que tengas una visión de él más allá del novio demasiado protector. A ver, entiendo la situación de no poder contar cosas a Luce por si arde y que se está matando para salvarla, pero también él podría poner un poquito de su parte, ¿no? Cuéntale algo, copón, que vale que Luce es gilipollas, pero tú tampoco eres mejor.

Para mí, lo peor de esta saga son los dos personajes principales, ya que los secundarios son mucho más carismáticos. En El poder de las sombras, además de ver fugazmente a los del primer libro (Cam, Roland y Arriane son los que aparecen un poquito más), tenemos a varios personajes nuevos: los directores de la Escuela de la Costa, Francesca y Steven que, además de pareja, son un ángel y un demonio; y varios compañeros de clase, entre los que destacaría a Shelby y Miles.

Por un lado, Shelby es la compañera de habitación de Luce con la que al principio se lleva bastante mal, por parte de Shelby, todo sea dicho. Luego descubres por qué se comportaba así. Sin embargo, a mí Shelby nunca me cayó mal, será porque no le tengo cariño alguno a Luce y si le metía caña, tampoco me importaba; aunque, eso sí, me gusta mucho la evolución que tiene, convirtiéndose en una gran amiga de Luce.

Por otro, Miles es un alumno nefilim que se convierte en íntimo de Luce en cero coma. Miles no me gusta un pelo. Una vez más, me siento muy rara, porque en otros blogs y tal la gente lo adora, pues a mí me da mal rollo. Es tan bueno, tan sencillo y tan tierno que no me lo trago.

Puede que sea porque con Miles se introduce un triángulo amoroso que, en mi opinión, sobra en la saga y que no me lo trago. A ver, se supone que el amor entre Daniel y Luce es tan grande que desataron una guerra celestial y, después, ambos vuelven a encontrarse y no pueden resistirse a estar juntos, aunque eso provoque le muerte de Luce. Entonces, lo siento, pero no me trago que Luce tenga dudas y los esté comparando constantemente. Vaya amor épico de chichinabo.

De hecho, el triángulo es lo que no me ha gustado del libro. Sigo pensando que sobra y que deberían concentrarse en darnos más información. Y eso que hemos empezado a saber más cosas y muy interesantes.

Una de las tramas recurrentes es que las sombras que Luce ve, las Anunciadoras, sirven para poder ver cosas del pasado. Eso sí, según advierte Steven se llaman sombras por algo y es que no muestran toda la realidad, sino que ésta está distorsionada, así que, claro, tampoco puedes saber estrictamente qué es cierto y qué no. Luce empieza a manipular las sombras y a ver retazos de sus vidas pasadas, por lo que se da cuenta de que su maldición no supone morir, sino dejar familias atrás que cargan con su muerte, lo que me parece algo muy interesante.

También me lo parecen los retazos de la antigua guerra celestial y la de la actual que, poco a poco, vamos descubriendo. Además de que hay un tercer bando (los repudiados), hemos descubierto que Daniel era un ángel muy importante que cayó. También que es importante que los ángeles se sitúen en un bando u otro (ya estén caídos o no), pero que, en realidad, el futuro del mundo está en manos de un ángel muy poderoso: cuando dicho ángel se decida, el destino lo hará también.

Luce, desde que escucha de labios de Arriane eso, está convencida de que se trata de Daniel y, cuando le pregunta sobre el bando que elegirá, éste no responde, sólo parece asustado. Para mí, que Luce (que está emperrada en que es una humana) es dicho ángel caído y que por eso todos intentan que Luce no caiga en manos de los repudiados. Por cierto, recalcar una vez más que me gusta muchísimo que en esta saga el bien y el mal no están claros, ni delimitados, sino que es más bien una cuestión de perspectiva.

En conclusión, El poder de las sombras ahonda más en la mitología que plantea Lauren Kate, lo que hace que sea mucho más interesante que Oscuros; también hay más acción y no es triste, lo que hace que sea mucho más dinámico. Sigue estando igual de bien escrito, es igual de entretenido, fácil de leer y te deja con ganas de seguir con la historia. Eso sí, como punto negativo el innecesario (y típico donde los haya) triángulo amoroso con unos personajes muy arquetípicos que recuerdan demasiado a Bella, Edward y Jacob de la saga Crepúsculo.

2 comentarios:

  1. Hola!!
    Hace poco me leí esta segunda parte de Fallen, y bueno, debo reconocer que la primera me encantó más *-*, la segunda la sentí algo tibia y creo que me emocionaba más cuando aparecían Cam o Arriane que cuando Daniel y Luce se encontraban (es obvio que sus encuentros siempre terminan en peleas -.-)
    Y bueno, concuerdo contigo... creo que Luce no es tan "humana", porque eso de poder manipular tan bien a las anunciadoras ya es algo que te hace pensar, además de que al final los Repudiados la buscaban a ella, prácticamente la adoraban.
    En fin, Luce y Daniel, me parecen algo sosos... Mis personajes favoritos son Cam & Arriane. Desde la primera parte me fascinaron, espero que en la tercera le den más protagonismo..

    P.D. El nombre sí es feito, hubiera sido mejor que lo dejaran como el original "Tormento"

    Saludos!! =)

    ResponderEliminar
  2. Para mí es el principal problema de la saga, cualquier secundario mola más que Luce y Daniel. Cam me encanta, Arriane también y me gusta muchísimo Gab, es mi idola también ^0^ Y, bueno, de la segunda parte me encantó Shelby y su evolución.

    Y desde el momento que los Repudiados sólo quieren que les acompañe, estoy convencida de que Luce es el ángel que tiene que tomar bando. Es que, no sé, para mí está claro que Daniel es del bando contrario al de Cam, el de los ángeles.

    PD: Yo no sé qué trauma tienen con los titulos de los libros, pero este hubiera quedado mejor como Tormento. Suena super bien. Y, por ejemplo, el que me estoy leyendo ahora, Rivales, en inglés es Rumours, xD.

    ResponderEliminar