Vive cantando 1x11 - Arrasando

 Pues vamos a por una nueva crónica de Vive cantando y esta semana me toca relatar el pedazo de desastre que se ha liado por todos los frentes. En serio, si es que no ha pasado cosa buena. Que van a cambiar el #SufroComoGeno por #SufroComoCualquierPersonajeDeViveCantando. Pero, aún así, la serie sigue yendo in crescendo y yo voy con la crónica. En ese caso, como todas las tramas están muy ligadas entre sí, pues no las voy a separar.

Tras todo lo que pasó en el episodio anterior, Trini está echa mierda y ha decidido contagiar su estado a la casa. Vamos, que no limpia, ni hace nada, sólo vagabundea por la casa y fuma. Su padre la acompaña, cuando ven a Juanjo más pedo que Alfredo y el bueno de Rafael, además de echarle automáticamente la culpa a Trini, le cuenta que Juanjo está enfermo. Por eso, Trini decide hablar con él, aunque a Rafael el plan no le convence demasiado.

Rafael le ve lagunillas al plan de Trini.

A la mañana siguiente, en el bar, Mariano y Cefe están comentando el fichaje del nuevo director deportivo del Rayo... quien dice "comentar", dice "poner a parir en plan Sálvame". En esas, el susodicho aparece en El caño y, tras abrazar tan simpático a Mariano, le ofrece un trabajo en el equipo. Alegría general. Los dos se abrazan, brincan, e incluso Cefe se une a la celebración.

Mientras tanto, César y Lucía intentan hacer una intervención a Juanjo para que deje de beber y vuelva a ser el gruñón de siempre, pero él sigue pasando. Mal, Juanjo, mal, que no quiero que te explote el hígado, coña. Por si no tenía poco, justo después aparece Trini para hablar y Juanjo le pide, perdón, ordena a César que se quede con ellos.

Lo primero que hace es pedir perdón por contárselo, lo que deja a Juanjo estupefacto y Trini acaba admitiendo que la ha cagado un montón, que lo está pasando fatal y que no deja de comer. Evidentemente, César apunta en cero coma cuánto la entiende. Pero Trini a lo suyo y acaba soltando de lo de beber estando enfermo. Al oír eso último, tanto César como Lucía flipan y Trini flipa porque ellos no lo sabían. Juanjo sigue en sus trece, diciendo que está bien y pidiéndole a Trini que le deje en paz, mientras se lleva una botella de whisky. ¡Juanjo!

Lucía: Ay, Dios... Menudo panorama...

Juanjo: ¿Y ahora qué le pasa a esta? ¿Tiene visiones o qué?

Además, Alma está preocupada por llevar la maternidad sola, pero La cuñadísima le dice que no se preocupe, que son las madres las que siempre hacen todo y que va a estar con ella a todas horas.

Más tarde, Mariano llega al bar hecho un pincel y encontrándose a Candela en plan pasivo-agresiva por la marcha de su marido. Cefe, todo salomónico él, señala que aunque él lo va a echar de menos, se alegra por él. Yo soy muy fan de este hombre. Total, que Candela, aunque se alegra por él, cree que no va a poder dar a basto sola y, milagrosamente, como caído del cielo, llega Jeco pidiendo pasta. Por eso, Mariano decide que Jeco trabajará en el bar y, claro, para Candela es tan válida la solución como la que dé un político español cualquiera.

Por la noche, Trini sigue depresiva, comiendo helado, por lo que su familia la intenta ayudar cada uno a su manera: Rafael le pide que haga la cena, mientras que Paula le da su sándwich antes de intentar hablar con ella. Pero Trini no suelta prenda porque, claro, lo de hablar es para que Paula lo haga, no ella.

En el karaoke, César y Lucía comentan lo de Juanjo, porque están preocupados, cuando llega Vanesa (recordemos, la novia stripper de César) y se empieza a poner celosa al verlos con tan buena sintonía. De hecho, no tarda en marcar terreno, besándolo y mirando a Lucía con la mirada "es mío, aléjate, cacho puta", que es el equivalente humano de mear a su alrededor.

Si es que quedan tan monos juntos.

A todo esto, Mariano ha ido a ver a sus cuñados para decirles que ha conseguido que el Rayo fiche a Carlos, así que hay celebración general... o no, porque Armenteros no está muy contento. Qué hombre más poco agradecido, colega.

Por su parte, Paula va al karaoke para hablar con Juanjo y dejarle caer, a su estilo, que le echa de menos. También intenta sonsacarle lo ocurrido, por lo que, en un primer momento, él se pone borde; luego, está a punto de soltarle la verdad, pero se calla y Paula insiste en que sigue coladito por Trini. Al final, Paula le pone los puntos sobre las íes a Juanjo al decirle que al beber estando enfermo, sólo está siendo terriblemente egoísta. Y eso le llega a la patata tanto, que se pone a limpiar y a echarle la bronca a César, lo que hace que éste se emocione. ¡Juanjo is back!

César tan contento cuando Juanjo le echa la bronca.

¿El problema? Que durante su etapa oscura, por llamarla de alguna manera, Juanjo recibió una orden de embargo. César, ignorando de eso, se despide tan contento y se va con Vanesa, que quiere presentarle a sus padres. César acepta, pero no puede al día siguiente porque es la fiesta de las 100 noches de La Bamba y quiere echarle una mano a Lucía. Vanesa se pone celosa y le dice que Lucía siente algo por él, lo que le deja anonadado no, lo siguiente.

Al día siguiente, en El caño hay varios personajes reunidos y, resumiendo: Asun presume como nadie, Alma no quiere ni ver a Jeco y Trini parece que se va arrastrando por ahí de depresiva que sigue. La cuñadísima intenta sonsacarle, pero Trini se va, así que Asun elige otro objetivo para meter el dedo en la llaga: Candela.

En el instituto, a todo esto, Carlos le cuenta la buena nueva a Paula y están tonteando, en plan monosos total, cuando se reúnen con Alma. Ésta comenta lo agobiada que la tiene su madre, cuando ven a Trini arrastrarse con su carrito de limpieza. Paula cuenta que le ha puesto los cuernos a Juanjo, que la ha jodido y que ambos dos están hechos polvo, mientras a Carlos la culpabilidad se le graba en la cara con luces de neón. Paula cree que su tía es un desastre y los dos hermanos defienden a Trini, por lo que la chica comenta que no sabe como ayudarla... aunque parece que se le ha ocurrido algo. Eso duele porque una sabe la verdad y sabe que tarde o temprano la verdad saldrá a la luz y será horrible y vamos a sufrir...

Sí, el episodio fue tan apocalíptico que estoy intentando poner capturas bonitas para compensar.

Que los Winchester nos asistan ;P

Y sigo, que pierdo el hilo. Mientras tanto, en el parque Lucía y César están repartiendo flyers y él le cuenta lo que piensa Vanesa. Tras las risas iniciales, todo se tensa un poco y Lucía le pregunta qué haría si fuera verdad. Al final, admite que siente algo, por lo que César se china un poco y ella admite que le ha sorprendido que, estando medicada, pueda sentir, enamorarse. Y ves en la cara de César que eso lo ha cambiado todo, pero ella sale huyendo. Jolín, César, ve detrás de ella. ¿Es qué no has visto comedias románticas?

Por su parte, Paula tiene un plan: para que Juanjo perdone a Trini, ésta tiene que cantarle una canción especial para él, pero antes se van de compras. Trini encuentra un vestido muy bonito, aunque es muy caro y Paula se ofrece a pagarlo, pero, claro, la culpabilidad sigue ahí y Trini no lo acepta. Paula flipa, porque no entiende nada, sobre todo cuando Trini sale corriendo diciendo que, por lo que ha hecho, no se le merece.

A todo esto, Candela vuelve al bar de la compra y se encuentra a Jeco tomándose un aperitivo. Candela flipa porque, claro, ella antes ha saludado a alguien en la barra. Resulta que Mariano ha contratado a un nuevo camarero, así, sin consultar ni nada. Candela no se lo toma demasiado bien y Mariano usa todo tipo de argumentos: que si era una sorpresa, que si es un antiguo jugador del Rayo que necesita ayuda, que si la pachorra caribeña... aunque sea argentino, claro.

En el karaoke, César intenta contarle sus dilemas amorosos a Juanjo, encima se tira por los símiles de comida, y, entre que Juanjo es Juanjo y está preocupado por la orden de embargo, le ignora completamente para irse a casa de Armenteros. Juanjo le explica la situación y le pide ayuda para conseguir algo de tiempo, todo ello mientras Carlos les espía y se siente culpable. Armenteros, por su parte, ni se inmuta porque, según él, nada regala nada a nadie. Jolín, tío, qué simpático eres, ¿eh?

De hecho, lo es tanto, tantísimo, que el karma decide castigarle, pues en ese momento le están haciendo la primera ecografía a Alma y descubren que va a tener gemelos.

¿Gemelos? ¿Dos gemelos?

En El caño, Candela descubre que el nuevo camarero es la repanocha: tiene todo limpísimo, es muy servicial, da carrete a los clientes, a La poli la tiene enamoradita perdida... lo que no le hace excesiva gracia, pero es que el muchacho lo remata cuando admite que acaba de salir de la cárcel.

Mientras tanto, en casa de Trini, Paula le da el vestido a Trini a modo de agradecimiento por todo lo que ha hecho por ellos. También le dice que, haya hecho lo que haya hecho, todo se puede perdonar y que, además, seguro que se arrepiente. Todo eso anima a Trini, que acepta el plan de Paula, así que la dos se ponen monísimas para bajar al karaoke y marcarse un dúo. Incluso logran convencer a Rafael, que era más partidario de dejar que todo fluyera, así que los tres bajan para el karaoke.

En el karaoke, César está con sus listas de pros y contras sobre Lucía y Vanesa, mientras Juanjo intenta darle la mala noticia. No tiene opción, pues Armenteros aparece en ese momento con su hijo y los responsables del contrato para celebrarlo, así que se pone en plan mafias con Juanjo: si tienen barra libre y tal, le ayudará a conseguir un aplazamiento. Mira aquí el Vito Corleone del barrio La Gloria. En serio, me sorprende que a Ricky no le enviara una cabeza de caballo... ¿O es que lo ha reservado para Jeco cuando se descubra que se tiró a su prima?

Julián: A partir de ahora, todas las canciones de Raphael las cantaré yo, ¿capicci? Y las de Albano también.

Después, Vanesa va a cantar una canción y, al buscar un trozo de papel para apuntarla, encuentra las listas de César y, claro, se cabrea un pelín. Si es que, César, ¿a quién se le ocurre dejarlas por ahí? ¿Es qué no has visto Friends? César, encima, se pone nervioso y reconoce que hubo tema entre ellos, por lo que Vanesa le pide que eche a Lucía para poder quedarse tranquila.

En esas, Trini, Paula y Rafael llegan. Cuando Paula ve a Carlos casi le da un chungo por el vestido que lleva, pero los otros dos le dicen que está muy guapa y tal. Entonces, Paula se acuerda de Nacho, así que deciden hacerse una foto para mandársela. El abuelo intenta mandársela vía whatsapp, mientras Trini le dice a Carlos que se aleje y que se centre en las de su edad y que Paula quiere una relación, así que tenga cuidado. Están hablando de esos, cuando Paula, sin querer, descubre los whatsapps de Carlos a Trini y se le rompe la patata. Medio citando a Sheldon: casualidad, ramera despiadada.

Mientras tanto, en El caño, Candela está intentando contactar con Mariano porque le ha metido a un presidiario en el bar, cuando el pobre hombre va a despedirse y ella le despide, pero no de decir adiós, sino de largarle. Candela intenta excusarse con que se basta con Jeco, que si éste está deseando trabajar en el bar, pero El camarero ha estado hablando con Cefe, Jeco y cía y está muy al día de la situación. Por eso, le pide que sea honesta y se muestra dolido por lo sucedido, aunque se va con mucha elegancia.

Jeco, tras comentar lo guay que es El camarero, se larga al karaoke, donde acaban de llegar Asun y Alma dispuestas a dar la buena nueva, pero no pueden porque justo en ese momento Paula le dedica una canción a Trini. Y ésta está tan contenta, pensando que va a ser como planeaba y, encima, porque incluso ha logrado hablar de verdad con Juanjo. Pero, claro, Paula se pone a cantar la canción de Soraya de "por mí te puedes ir al cuerno" e incluso señala a Carlos para que quede claro que lo sabe. Por si había dudas.

Emanda mode on.

Y Trini y Juanjo alucinan.

Rafael, entonces, le da el móvil a Trini diciéndole que Paula se ha puesto muy mal al verlo. Y en ese momento se ha liado todo un huevo: por un lado, Carlos ha ido a preguntarle a Trini si Paula lo sabía, Juanjo se ha puesto a gruñir, Carlos le dice que ha ido al karaoke para ayudarle y una cosa ha llevado a otra y se han acabado zurrando y Juanjo dice en voz alta que se acostaron. Vamos, que se ha liado parda no, pardísima.

Paula sale corriendo y Trini la sigue para explicarle que no fue nada, pero Paula está muy dolida, que normal. Joder, Trini, si es que la cagaste muy, mucho. Paula le dice que no se merece que nadie haga nada por ella y que ya no existe y, encima, El abuelo le echa una cantada de esas que te destrozan por haber hecho daño a la niña.

A Carlos también le cae la suya, aunque más que el hecho de que se tire a alguien mayor, es porque es la Trini. Manda huevos que ese sea el problema, todo sea dicho. Están en esas, cuando Asun cuenta lo de los gemelos y dice que con dos ya no puede.

Pero en el karaoke el drama no se ha terminado, pues Lucía va a hablar con César porque ha visto la discusión. Cuando César le cuenta todo, Lucía cree que la va a echar, pero él no quiere que se vaya, aunque también señala la papeleta que tiene: que quiere ir en serio con Vanesa y que, justo en ese momento, Lucía la ha dicho lo que siente, por lo que cree que deberían trabajar días alternos para mantener un poco las distancias. Lucía comenta lo sumamente bueno que es César (jo, ya te digo) y que le da rabia haberlo dejado escapar, porque no hay nadie tan bueno como él. Qué bonito ^^ Lucía le besa, pero le besa, le besa, en plan peli romántica, aunque luego sale corriendo porque no le puede hacer eso. ¡Este episodio va a acabar conmigo!

Yo me quedo con el beso.

A la mañana siguiente, Candela y Mariano están discutiendo por el despido del camarero nuevo y porque Mariano no está en casa, sino fuera cumpliendo su sueño. Mariano le dice que su sueño también consiste en contarle como ha ido el día. Están pensando en contratar a un nuevo camarero, cuando llega Trini y todo la miran fatal, así que ella se larga diciendo que no es la única que la ha cagado en el barrio. Jolín, como se pasan. Vale que Carlos sea menor de edad, pero ni que fuera una pervertidora de menores, copón.

En el instituto, Paula está tristísima y Carlos va a verla, por lo que ella le espeta que todo lo que hizo, lo hizo por Trini. Carlos le dice que, aunque al principio sí que era así, luego la conoció y que quería estar con ella, pero Paula ya no quiere estar con él. Mira que yo te lo dije crónicas atrás, Carlos, pero como no me haces caso...

Candela, a la que las palabras de Trini le han llegado, llama al Camarero para pedirle perdón y él le explica que, cuando dejó el fútbol, metió el dinero en un negocio y que resultó ser un desfalco y que por eso fue a la cárcel. Candela también admite que lleva 20 años acostumbrada a hacer todo sola y que, cuando él llegó, la hizo sentir una inútil. Al final, deciden trabajar juntos.

A todo esto, César está a punto de conocer a los padres de Vanesa y el pobre lleva una cara de funeral del quince. Cuando ella le besa, él se da cuenta que no es lo mismo que con Lucía y así se lo dice a Vanesa, al igual que le dice que la quiere. En esas, llegan los padres y César les explica lo gran chica que es Vanesa, pero que la quiere como amiga y no la va a quitar del feisbuk ni nada. Eso me ha matado, xDDD.

Mientras, en Cuñadisimosville, Asun sigue afectada por la noticia de los gemelos y Alma no es que esté mejor. No obstante, Armenteros parece que se ha despertado con corazón y ha comprado un coche de gemelos súper bonito y está dispuesto a arrimar el hombro vengan los que vengan. Están los tres tan contentos, cuando suena el teléfono... chan, chan, chan, ¿qué habrá pasado?

Pues resulta que Carlos ha tenido un accidente de moto y, aunque está bien, se ha destrozado la rodilla y no podrá jugar al fútbol en nueve meses, es decir, nada de contrato. Hostia tú, qué putada más grande.

Por la noche, Trini vuelve a casa y se encuentra a Juanjo en la puerta del karaoke, a punto de fumar. Como él sólo tiene un cigarro, tienen uno de sus piques de "quién tiene el peor día" y acaba ganando Juanjo porque cirrosis + embargo es un plan desolador. Juanjo le anima a cantar la última.

Una capturilla de Juanjo, que hoy no había puesto ninguna en condiciones.

Luego, lo vemos poniendo las canciones, cuando llega César. Intenta decirle la terrible noticia, pero César está contentísimo porque va a estar con Lucía, la chica incluso le ha llamado. En esas, se oye música y Trini le canta a Juanjo 7 vidas y a mí la escena me parece la perfección. En serio. La canción me encanta y encima les pega un huevo. Ainss, qué bonita :3

Lo malo es que, mientras oímos la canción, también escuchamos el mensaje que le ha dejado Lucía a César: que le quiere mucho, que no puede complicarle la vida y que por eso se va lejos, donde no pueda encontrarla. Yo ya no sé si cogerme una tarrina de helado de trufa cual Trini, cortarme las venas con una hoja de lechuga o qué. Si es que entre el drama de estos dos, las miradas de Trini y Juanjo tan tristes, es todo tristísimo. Pero ahí no acaba todo, no, qué va, pues cuando la canción acaba, Trini va a hablar con Juanjo y le dice "¿de verdad quieres que todo termine así?" y Juanjo le dice "pelirroja, en la vida hay que saber cuando las cosas terminan para siempre". Entonces, Trini llega a casa donde sólo se encuentra animadversión y la voz en off de Rafael dice que Trini lleva todo la vida haciendo daño a los que quiere y que teme el día en que descubra que ya no puede hacer daño a nadie porque se ha quedado sola.

Ay, mi patata, qué dolor de corazón de episodio. Pero, bueno, esto es todo por esta semana. El de la próxima parece más animado con César y Trini intentando salvar La bamba, con Rafael y Paula incluidos, y Alma embarazada de Jeco (yey =D, ¡lo sabíaaaa!).